Las gasas se rasgan...

La noche del lunes 24 de agosto del 2005 fue encontrada una mujer muerta de unos 30 años,  bajo un puente peatonal en el barrio bravo de Tepito, en la Colonia Morelos, una zona  muy peligrosa del Distrito Federal mexicano,por la venta de estupefacientes,armas y productos falsificados. ... El cadáver permaneció como desconocida, largos días en el Semefo, la morgue de la ciudad. Los forenses creyeron que era una yonki indigente, por lo que estuvo a punto de ser enviada a la fosa común: el dictamen forense de la Procuraduría –que desapareció semanas después, junto con todo el expediente– decía que se quedó sin vida por un estallamiento total de vísceras...La autopsia atribuyó la muerte  a un paro cardiorrespiratorio debido a esa congestión visceral generalizada.  Tenía siete meses de embarazo y  aunado a esto,también fué apuñalada...Los forenses dieron por hecho que la mujer murió en ese sitio porque buscaba droga para su uso personal,pues su cuerpo quedó agazapado bajo el puente,y a las puertas de una vieja vecindad que es famosa por la venta de droga en el barrio de Tepito.
Y es que la extraña muerte de Natasha Fuentes no hubiera trascendido más allá de una nota morbosa en la prensa roja,  de no haber sido la hija del famoso escritor mexicano Carlos Fuentes... y cuando eso se supo,de inmediato alguien ejecutó la censura del trágico crimen,que por ello, quedó impune.

Pero la verdad flota como el disel sobre los charcos de la urbe,y pronto se filtró que Natasha era toxicómana, y como se robaba los visones de su madre para comprarse droga,ante las largas ausencias de sus padres,era la servidumbre la que le dosificaba el dinero...y también se quiso acallar que Natasha murió el mismo día en el que su hermano Carlos se suicidó,pero años antes, en Puerto Vallarta, Jalisco, en presencia de su amigo, debido al sida; aunque se dijo que el joven había fallecido por un infarto pulmonar,a causa de la hemofilia...El escritor perdió a sus hijos de un modo terrible,pero supo cuidar su leyenda de "dandy" y ocultó al público sus desgracias.
Y en su tumba de Montparnasse Fuentes tiene inscrito junto al suyo,el de sus dos hijos, enterrados ahí antes que él.

Pero algo temible se cuenta en ese populoso barrio de Tepito,que pulsa en el corazón del Centro Histórico de la ciudad de México: Se dice en voz baja que  el fantasma de Natasha espera agazapada en los puentes peatonales de la zona, y que pasada la media noche,deambula pidiendo,entre gemidos espeluznantes, unas monedas para su chute de droga, a los imprudentes que se atreven a cruzar a esas horas mortales ...

Carlos Fuentes:
"Sobre Natasha, diré que es una “isla solitaria”...fue una niña rebotona, alegre, llena de imaginación y humor. La gran ilusión de un padre es que su hija sea siempre una fuente de ternura y entre siempre a la sala haciendo cabriolas. Pero las fotografías se desvanecen, las gasas se rasgan, las sedas se amarillean. La primera comunión no es un evento eterno...” 

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