Los hurones son unos indígenas canadienses, también conocidos como wyandot, que viven en pequeñas comunidades del sur de Ontario. Aunque también se encuentran clanes hurones en Ohio y Míchigan. Los hurones hacen bellas tallas de madera,desde minúsculas aves hasta sus canoas tradicionales, en su reserva de Quebec, Canadá. Siempre se les ha reconocido un gran valor para sobrevivir,sin embargo hay algo a lo que ellos temen como a la peste...
Contaban los ancianos que durante un aciago invierno, uno de los clanes acampó en un paso de montaña para resguardarse de una tremenda nevada, cuando surgió la desgracia: Algunos niños de la tribu enfermaron con altísimas fiebres. El hombre-medicina señaló a una pequeña niña como la culpable del contagio de todos los demás niños. Así que,para salvar a los que aun no enfermaban, unos hombres arrancaron a la niña acusada de los brazos de su madre, y la llevaron colina arriba para abandonarla en los riscos,dejándola morir ahí... Luego,cuando cesó la nevada, el clan levantó el campamento y partió hacia la rivera del Rat River abastecerse de alimento.
Y entonces así fue como se originó el maligno espíritu del Acheri,pues el fantasma de la niña buscó venganza...
Y se cuenta que en los inviernos más crudos el espìritu de la niña baja de las montañas durante la noche para traer la enfermedad a los seres humanos, especialmente a los niños. Sus ojos profundamente oscuros son hipnóticos y presagian la muerte.Parece una niña frágil con la piel de color gris pálido y aterida por el frío y como está en los huesos,despierta la compasión de las mujeres que le ofrecen cobija y algo de alimento.Luego deambula por la aldea como cualquier cría inocente...
Pero cuando el Acheri proyecta su sombra sobre otros niños,estos mueren infectados por un extraño contagio... pues el Acheri es poseedor de muchísimos males y enfermedades humanas y disfruta trayéndole el mal a los niños sobre todo, pero también se dice que si un anciano escucha su canto, cae enfermo gravemente y en muy poco tiempo todo el poblado contraerá los males, pues las enfermedades que transmite este espectro son realmente contagiosas y terribles,pues el Acheri vaga en las tierras hurón para hacer sufrir a otros lo que a ella le toco vivir.
Los ancianos de las tribus aseguran que la única manera de protegerse de las enfermedades transmitidas por la sombra del Acheri es con un collar de cuentas rojas, o una cinta roja en la muñeca, pero lo mas efectivo para destruir al Acheri,y que la niña fantasma pueda descanzar en paz, es colocar una cinta mágica, de plumas y piedras rojas, alrededor del cuello del espectro...
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