Antiguamente, el temor a ser enterrados vivos llevó elaborar ataúdes con pequeñas perforaciones en ellos, las cuales conectaban con una tubería de cobre y una campana. Esto era para que las personas enterradas vivas por error, ya sea por producto de una confusión o una condición médica, pudiesen respirar y tocar la campana para pedir ayuda.
Esa tarde,en el cementerio,el sepulturero Harold escuchó el tañido de una campana entre las tumbas. Siguió el sonido, creyendo que se trataba de niños o adolescentes bromistas en el cementerio. Al acercarse a la lápida de Sarah O'Bannon, escuchó una voz proveniente de la tubería:
- Eres Sarah O'Bannon?- Preguntó Harold.
- ...Sí!- gritó la voz lejana.
-Moriste el 17 de junio de 1827?
-...Sí...
-La tumba dice que falleciste el 20 de febrero de 1857-aclaró Harlod con firmeza.
-No, Estoy viva, fue un error! Sácame de aquí!-suplicó al voz lejana.
-Lo siento, señora.- Dijo Harold, quitando el badajo a la campana y llenando la tubería con tierra,- Pero estamos en noviembre de 1900... Cualquier cosa que seas, estoy seguro que ya no estás viva. Y no te voy a sacar de ahí...-.
-----------------------------------Zuicidio
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