La mujer ha doblado su negro chal.
De pie, junto al espejo se coloca su nuevo vestuario de colores. Con sus manos espectrales pone flores y plumas en su triste cabeza carcomida de horas.
Lenta, en su rito, completa su disfraz con guantes y zapatos para el frìo.No oye, no habla, no se ríe.Desprende un viento frío de orfandades y un hálito de flores derrotadas.
Esta mujer, viajera de lo inmóvil,jamás descansa en estación alguna.
Puede tardar, más llega a su destino,a su espacio de tránsito,puntual y sedienta.
La mujer prepara su maleta:
para este nuevo viaje nada puede olvidar.Como joyas maléficas va guardando cuidadosamente dos recuerdos,unas flores marchitas,un libro,algunas viejas fotos y una lista de ciudades ya recorridas.
Esta mujer de paso leve y actitud sombría irá hacia la noche y entre luces y de sombras,ebria de soledades, cumplirá cual verdugo su destino....
------------------------------------------>Zuicidio
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