
Aquel hombre era invisible, pero nadie se había percatado de ello.Sólo lo notó una triste mujer que permanecía bajo la lluvia al borde de aquel puente solitario.
-El suicidio es una de las formas de cortesía que más debería inculcarse desde la niñez.-musitó el hombre,casi al oído de la mujer.
Ella,entonces,intentó verlo,pero sólo estaba la fina lluvia,el vapor de su propio aliento, y el frío de la tarde...
-Conoce usted el caso de aquél filósofo-le preguntó el invisible - que apenas ser presentado a los invitados de una fiesta organizada en un décimo piso, saltó por la ventana para no importunar a nadie con su presencia...?
-No, no lo conozco-dijo ella en suspiro.
-Lamentable-masculló la voz más cerca aún de su oído- Porque es patético que la gente prefiera la grosería de permanecer viva para nada importante...
-Si,y más cuando la vida es tan real que...-la mujer no terminó de decir lo que pensaba porque algo la empujó de modo tan súbito,que su cuerpo dió un giro sobre la baranda del puente, y cayó al agua turbulenta donde murió cortesmente...
----------------------------------> Zuicidio
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