6/05/2015

El fantasma del molino













En 1860, Musgo Kent y Joseph Currier abrieron un gran  Molino de harina, con el más moderno fresado de aquellos años. Usaban la fuerza del agua del Río Rideau,  y su harina fue pan de muchas mesas de todo el pueblo de Manotick. Pero en realidad el molino Watson ganó su fama por la leyenda de Ann Currier, la esposa de Joseph, cuyo fantasma sigue en la fábrica, desde su muerte en un trágico accidente ocurrido allí en 1861.
Ann  Currier, fue la segunda esposa de Joseph Currier, el co-propietario del Molino. Se cuenta que era una joven dulce y hermosa,con vestidos a la moda de Nueva York y con una curiosidad de niña. Resulta que Joseph Currier la conoció en Niágara Falls y se enamoraron a primera vista. Se casaron poco después,y en plena luna de miel,Joseph llevó a su esposa a conocer el molino,por lo que socio y empleados organizaron una pequeña fiesta de bienvenida a la pareja...La fiesta fue menguando cuando la noche empezó a caer,pues los molineros temían cruzar la oscuridad desde el molino hasta sus casa por una manada de lobos que rondaba por esos días en la rivera del río...




Avanzada la noche quedaban pocos, ya ebrios por el correr del bourbon y la sidra,por lo que Ann,algo aburrida, decidió recorrer los pasillos entre los equipos y la maquinaria impresionante del molino. Pero pasó que en un acigo momento,los lobos aullaron demasiado cerca de los ventanales,Anne al escucharlos se asustó y quiso correr hacia donde se hallaba su marido,con la mala suerte de que la crinolina y la cauda de su elegante vestido neoyorquino quedaron atrapados en una de los ejes de las turbinas de la segunda planta, y por la fuerza del cause de agua en la noria,Ann fue arrojada contra una columna,donde quedó asfixiada y finalmente desnucada con sus gasas...
Joseph corrió a salvarla,pero la encontró ya muerta. La culpa lo hundió de tal modo,que dejó el molino,  vendió sus acciones a su socio y abandonó la finca,se fue a québec,y jamás regresó a  Manotick...
Y es que después de esta tragedia, ha habido numerosos avistamientos del  fantasma de Ann  en el molino de Watson, dandole fama al molino de ser uno de los edificios más frecuentados por fantasmas de Ottawa. La embrujada naturaleza del edificio no sólo es tema de cuentos terroríficos contados en el crepúsculo y  ante la hoguera,sino que su influjo causó,por ejemplo,que el siguiente dueño del molino, al cual debe su nombre actual, el señor Harry Watson, que lo compró en 1946,fue perseguido varias veces por el fantasma de Ann. Watson fue el último propietario para operar el molino a nivel industrial,hasta que harto de sustos,lo vendió a la sociedad de Conservación Rivière Rideau,de Otawa, en 1972, que lo convirtió en un museo,y desde entonces han sido muchos los que han visto al fantasma de la mujer deambular por el segundo piso del lugar, y a veces,en noches de lobos,se pueden escuchar sus espeluznantes alaridos...
Hasta el día de hoy, el molino de Watson aún vende harina de trigo integral molido a la piedra que se hace en el lugar,como parte de la labor del museo, y todavía tiene gran parte de la maquinaria original en buen estado,incluyendo la turbina donde murió la pobre Ann...

-------------------------------------Zuicidio

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