San Ernesto de la Higuera...

La palabra "Che" significa en guraní o mapuche “gente” del pueblo. Y es cierto,el Che Guevara como guerrillero, político, escritor y médico fue parte del pueblo y luchó por él  contra la opresión y dominación imperial.
 Es sabido que en Bolivia fue capturado y ejecutado de manera clandestina por el Ejército boliviano bajo órdenes de la CIA el 9 de octubre de 1967.
Ese mal día, el Che Guevara dio la última orden, esta vez a su verdugo: "Sosiéguese...Apunte y sostenga firme el arma: va a matar a un hombre". Las balas de la ráfaga de la ametralladora lo atravesaron y  derrumbaron de costado, mal herido, para ser rematado finalmente por otro disparo directo al corazón...
Creyeron que matándolo, acabarían con quien lideró la lucha revolucionaria en Latinoamérica y en diversas partes del mundo para extirpar de raíz el abuso, la explotación, la desigualdad y la injusticia social. Pero en contra de lo que creían sus asesinos, el mismo día de su muerte el Che resucitó ya invulnerable y enorme, para vivir en el ideal del pueblo honrado y trabajador para siempre. Su figura se convirtió en un símbolo de relevancia mundial que representa la lucha contra las injusticias sociales o de rebeldía y espíritu incorruptible...
Hay una imagen  terrible  del Che muy difundida. Yace sobre un piletón de cemento rodeado de sus verdugos. Está con los ojos abiertos y vidriosos.Han traído su cuerpo hasta Vallegrande en helicópetero,desde la humilde escuelita del ignoto pueblo de Bolivia llamado La Higuera donde horas antes fué asesinado.
Le  tomaron  cientos de fotografías desde distintos ángulos en aquélla pileta...

Primeros planos de su rostro, o rodeado por militares, o con gente del pueblo acercándose a conocerlo, y con los agentes de la CIA posando triunfantes ante su cuerpo, convertido en trofeo de guerra.
En muy pocas fotografías aparecen los otros dos guerrilleros ajusticiados con el Che,que yacen a su lado,pero tirados en el piso.Como si fuesen el arquetipo de Dimas y de Gestas.
Pero en realidad fueron “Arturo” y “Antonio”, los compañeros que murieron con el Che.
(El nombre de “Arturo” era el nombre clave de René Martínez Tamayo. Se había unido al ejército rebelde en Cuba, cuando tenía 17 años. En la guerrilla era el operador de radio. Y “Antonio” fué Orlando Pantoja. Miembro del Ministerio del Interior de Cuba antes de incorporarse a la Guerrilla en Bolivia.)
Y esas fotografías pòstumas favorecieron que la figura del Che a nivel popular se transformara en leyenda. Y tan es así que ell pueblo boliviano lo ha incorporado a su panteón místico, más como un santo que como un revolucionario, pues se lo ve como un martir misterioso,y claro,hermoso.












Y es que el retrato de ese Che exánime,yaciendo en el lavadero del hospital de Vallegrande,después de su ejecución en La Higuera, nos remite a esa apariencia de "Cristo muerto"  que recuerda mucho a la pintura renacentista, en especial la de Andrea Mantegna. Y quizá  fue esa foto la que contribuyó en mucho  a esa parte de la leyenda del Che que incluye una vertiente religiosa que le atribuye milagros.

Y es que en aquéllas regiones donde pasó el Che con su guerrilla,nació el culto a  "San Ernesto de La Higuera", como le llama la población que le atribuye diversos milagros  como ayudar a que no falte comida o a hallar niños o ganado perdidos,o sanaciones realizadas por obra del "doctor Ernestito"...
Y es que el Che trasciendió de mil maneras a través de su propia muerte, de su enorme sacrificio y heroísmo, y eso es ya patrimonio del pueblo latinoamericano,que va desde la moda de su imagen en las camisetas,hasta el sustento de una nueva ideológía altermundista.

Así pasa entonces que en su vertiente mística,cada octubre, en la pequeña ciudad de Vallegrande, se le rinde culto al legendario revolucionario. Desfilan con mucha devoción los lugareños con ofrendas de flores, velas y plegarias e invocaciones a su espíritu para interceder por ayuda o algún milagro. Cada aniversario de su muerte se convierte en una peregrinación de cientos de personas, en su mayoría pobres,fervorosos de el Che en el arquetipo del Cristo Yacente.
Para ellos,en su ignorancia, el guerrillero es antes que nada un " almita milagrosa " dadas las trágicas circunstancias de su muerte. La política ha sido sobrepasada por la mitología en la que el guerrillero se ha convertido con el transcurso de los años en un santo a quien los lugareños acuden con sus ruegos para recibir algún milagro.
En su conciencia mágica no reconocen en él a un luchador social sino a un alma que puede ayudarlos a sobrellevar las penas de la vida cotidiana. Incluso las caravanas de los campesinos pueden ser consideradas como romerías a un hombre que alcanzó,para ellos, dimensiones sobrehumanas por el misticismo que irradia.
Y son curiosamente,los mismos campesinos que no quisieron ayudar al Che vivo, y que incluso dijeron a los militares dónde podían encontrarlo, pero que ahora hablan con veneración del "San Ernesto" en una especie de confusión culposa,que une al Che con el Cristo Yacente...
A pesar que su busto de guerrillero se levanta en la plaza de La Higuera, colocan al Che en estampitas junto a fotografías colocadas en altares provisionales del Papa Juan Pablo II e imágenes de Jesús. Donde miles de campesinos bolivianos le rezan a San Ernesto de Vallegrande pidiéndola algún milagro o agradeciéndole por una gracia otorgada.
En su entender los lugareños creen que sus rezos han surtido efectos y “San Ernesto” les ha traído milagros, como las operaciones gratuitas realizadas por gente cubana y les han enseñado a leer y a escribir...Y en Vallegrande,la lavandería donde se encuentra el piletón que sirvió para exhibir el cuerpo del Che. Se encuentra en el fondo del Hospital Sr. de Malta.miles de visitantes han pasado por este lugar. Dejan flores,velas,o han escrito en sus paredes distintas frases, promesas, dedicatorias.

Es posible que “San Ernesto de Higuera”, o el cristo de los guerrilleros, se sorprendería al ver el fervor místico que le tienen esos pueblos,y tal vez  ante esto,el Che diría aquello de :
“…ustedes no entienden lo que yo escribo y repito siempre. Aquí lo que hace falta no son homenajes, sino trabajo. En cuanto a los honores, se los agradezco, pero les voy a responder en francés, que es más delicado, para no ofenderlos: Les honneurs, ca m´emmerde!.” (los honores son una mierda)..."

----------------------------->  Zuicidio