3/01/2010

Un rayo de luz frenopàtico...


En el informe forense de Bernardo de Quirós decìa:
“ Su cráneo, su frente parece la de un neandertal. Mandíbulas prominentes. Es un macho brutal, un monstruo. Su rostro está lleno de asimetrías. Un enigma de la moderna antropología. Y en los crímenes algo extraño le ha obligado a actuar. El dice que ha sido el demonio.”
Ramón Apráiz, un prestigioso médico alavés, junto a once colegas dictaminaron que no existía en Díaz de Garayo .el Sacamantecas,enajenación mental, siendo perfectamente consciente de lo que hacía.

A las ocho de la mañana del 11 de Mayo de 1881, en el polvorín viejo de la ciudad de Vitoria, se le cubrió la cabeza al Sacamantecas con un capuchón negro y se le rodeó con un collarín de hierro. El verdugo más famoso de la época llegado desde Burgos, Gregorio Mayoral, comenzó a girar el torno hasta que se le quebraron las vértebras cervicales y el sacamantecas murió asfixiado. El garrote vil había puesto fin a uno de los mayores sanguinarios del paìs vasco.

Su cadáver se expuso públicamente para el “macabro” goce de aquellos vecinos que deseaban verlo muerto, y fue enterrado,sin cabeza ya, en una fosa común del cementerio de “Santa Isabel” en Vitoria...

Varios antropólogos de Bélgica y Suiza viajaron hasta Vitoria para observar el cráneo de aquel asesino totalmente desproporcionado...Pero el diagnòstico final lo tuvo el doctor Esquerdo...
"El criminal ha dejado de serlo,el cadáver ha resuelto el problema; su cerebro abierto ha manifestado la causa del crimen; su encéfalo ha sido una revelación" ,publicò la crónica de La Vanguardia que detalla la autopsia hecha al famoso 'Sacamantecas'...Según cuenta este artículo, un doctor le abrió el cráneo al asesino en serie y concluyó que no es que fuera un criminal, es que estaba como una cabra...
"Hay locos que no lo parecen", dijo el doctor que experimentó con el cadáver del Sacamantecas. Una afirmación que habiéndose pronunciado en 1881 siga tan cargada de sentido en este nuestro siglo XXI bien se merece que se siga investigando en la hemeroteca de La Vanguardia:
A finales del siglo XIX,la psiquiatría está viviendo una revolución científica en Europa. Los conocidos, por aquel entonces, como alienistas o frenopatòlogos desarrollan sus teorías sobre la degeneración. Según ellos, la locura del degenerado es hereditaria y se refleja en rasgos observables empíricamente. Esta locura se manifiesta por el abuso del alcohol, la "vida disoluta" o, en último término, por un accidente o enfermedad.
En España, en esos años destacò el ilustre frenólogo Doctor Esquerdo,defensor de estas teorías degeneracionistas y que luchò por dar validez forense a sus pruebas psiquiátricas.
"Ojalá un rayo de luz frenopático se inicie por las rendijas del entendimiento humano hasta penetrar en la conciencia del recto magistrado", decìa el doctor...
Así que no es de extrañar que cuando la justicia le ofreciò la posibilidad de estudiar el cráneo de un asesino acabado de ejecutar, el doctor diera machincuepas de alegría.
Cuando el reo Sacamantecas es ejecutado. "Dicen que oyó la sentencia de muerte con mucha serenidad", detalla el periodista de La Vanguardia. En todo caso, sereno o no, el Sacamantecas pierde la cabeza. Y ésta, seccionada, llega a manos del doctor Esquerdo, quien, ansioso, se había desplazado a la capital de Álava para hacer las pertinentes "observaciones en el cráneo del famoso criminal". Mediante la observación científica del cerebro y los antecedentes familiares, el frenópata quiere demostrar que el Sacamantecas es un degenerado, hijo de una saga de degenerados. Así que, bisturí en mano, el equipo del doctor Esquerdo se dispone a realizar la autopsia que debe demostrar al mundo que la teoría degeneracionista merece incluso premios. Antes de penetrar en el cráneo del Sacamantecas, no obstante, doctor y periodistas,elaborando el primer perfil psicològico de un criminal, ahondan en los antecedentes familiares del asesino y en la propia personalidad de éste:
Según cuentan los vecinos,el padre del Sacamantecas "fue borracho, desigual, cruel con sus hijos"; la madre, una histérica; de los cinco hermanos no hay uno bueno, y la que se lleva la palma es su hermana Florentina, a quien el periodista le dice de todo menos guapa: "es repulsiva, violenta, cruel, vengativa, de subritérico color, enjuta de carnes, de pequeños, negros, vivos y penetrantes ojos; impúdica". Es decir, que el condenado no tenía precisamente una familia ejemplar, si no, según palabras del propio doctor, "un desgraciado vivero de criminales".Y para él tampoco hay buenas palabras.
Al Sacamantecas lo definen así: "60 años, sanguíneo, atlético, de estrecha frente y plano occipucio, con ancha base del cráneo, color animado, pómulos salientes, fruncidas facciones, ojos pequeños, hundidos, desviados y uno torcido de siniestra mirada, tenia dos hidróceles, era imbécil é idiota, egoísta, glotón é indiferente; taciturno y frio, no tuvo un amigo ni amor más que al vino". Lo que se dice una joya...
Sentados los precedentes, ahora sí, el frenópata procediò a realizar la autopsia. Ante una pequeña multitud (16 médicos de Vitoria, 10 militares, 6 alienistas, algunos farmacéuticos y otros tantos periodistas)....Y tal parece que descubre la aberraciòn fìsiològica: "La anatomía patológica ha dado la razón al doctor Esquerdo", confirma el periodista presente en el espectáculo de la autopsia. Un periodista que, pudoroso como pocos, detalla la penetración en el cerebro del Sacamantecas siguiendo la siguiente premisa: "No diremos aquí más que aquellas deformidades y alteraciones que en un periódico pueden decirse, y quizá las que callemos tengan más valor!". Y, a continuación, su crónica desgrana las intimidades morfológicas del manoseado cráneo del asesino. Que si el cerebelo es aplanado y pequeño, que si el cuerpo romboidal está disminuido y decolorado, que si los corpúsculos de Pacchioni son más grandes de lo que deberían ser, que si la cresta occipital externa también es mayor de lo ordinario… que si un montón de cosas, cada cual más incomprensible por el común de los mortales. Pero lo que importaba era que lo entendieran los expertos, y así parece que ocurre.El doctor Esquerdo logra que los magistrados acepten sus teorías. "Felicitamos al insigne alienista, honra de la escuela española". Y, a partir de entonces, no será raro verlo triunfar como criminólogo médico en casos de mucha repercusión social. La teoría que supone que analizar los cráneos de los asesinos puede ayudar a determinar las causas de sus crìmenes,es fallida,pero sigue vigente. Se llevó a la práctica, por ejemplo, en el caso del asesino de Winnenden. Los científicos analizaron el cráneo del joven de 17 años que había protagonizado la terrible matanza escolar para intentar determinar qué es lo que le había llevado a cometer los crìmenes,pero aùn no se conoce ningùn resultado pragmàtico que pueda servir a la criminologìa...
(Fuente:hemeroteca de La Vanguardia,Barcelona)

---------------------------------------->Zuicidio

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