Decido acabar con mi vida, y me arrojo al paso del tranvía.
Un hombre se tumba junto a mí, sin pedir permiso, mientras el convoy llega y no llega.
Al poco, una pareja se acomoda a nuestro lado.Otros dos,con apariencia de obreros, llegan y se acurrucan por ahì cerca...
Seis personas tendidas son suficientes para alertar al tranviario, que comienza a frenar la marcha del vehículo.
Cuando el tranvía se detiene a un palmo de mi brazo izquierdo, los individuos tumbados en el suelo se pueden contar por docenas.
El mundo del arte me loa y me concede el no deseado título de Lìder de la resistencia urbana y considera la Tumbada sobre las vías como mi primer gran éxito ya que han bajado el precio del boleto del tranvìa y han aumentado sustanciosamente el sueldo de los tranviarios y hasta se ha logrado un profuso seguro para los pasajeros...
Yo, que la considero un fracaso, decido saltar al vacío...
--------------------------->Zuicidio
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